Salud y nutrición

Ultraprocesados: urge alertar sobre los riesgos de su consumo para la salud

Las barritas de cereal, las galletas, los jugos envasados, las frituras, las bebidas gaseosas, pizzas y hamburguesas precocidas son, entre otros, los alimentos conocidos como “ultraprocesados”.

Estos se definen como aquellos que han sido alterados en su forma natural mediante técnicas industriales, y que contienen sustancias derivadas de otros alimentos. Se caracterizan por:

  • Altos niveles de sodio, azúcares añadidos, grasas saturadas y grasas trans.
  • Estar nutricionalmente desequilibrados.
  • Contienen aditivos que dan color, sabor, textura para imitar alimentos.
  • Pocos micronutrientes esenciales.
  • Alta cantidad de calorías.
  • Formulados para consumir en forma rápida, sin cocinar.
  • Una larga lista de ingredientes con nombres desconocidos.

La mayoría de estos productos se encuentran fácilmente en las estanterías de las tiendas de barrio o góndolas del supermercado. Son de fácil acceso y costo.

Cada vez más, la evidencia científica muestra en forma contundente que el consumo excesivo de estos productos genera desde inflamación crónica y daños metabólicos, hasta una larga lista de enfermedades que van desde problemas cardiacos, obesidad, afecciones neurodegenerativas, depresión y ansiedad.

Una entrevista con el médico y genetista Jorge Dotto explica que este tipo de alimentos representa la gran paradoja de la alimentación moderna, en la que anhelamos longevidad, pero se sucumbe con comidas de bajo perfil nutricional. “En las últimas décadas se convirtieron en protagonistas de la dieta occidental, porque ofrecen soluciones sencillas para llevar a la mesa, ahorrando tiempo de preparación de las comidas”, comenta.

Etiquetado, una advertencia urgente

Esta realidad ha llevado a promover una normativa mundial para regular los alimentos con el fin de que los consumidores estén informados al momento de compra de los riesgos para la salud. Diversas iniciativas a lo largo del siglo XX establecieron una serie de regulaciones. Fue en 1979 cuando se aprobó la Directiva de Etiquetado de Alimentos, con información mínima de los valores nutritivos de los productos.

En Guatemala, existe una iniciativa de ley 5504 titulada “Ley de Promoción de la Alimentación Saludable”, pendiente de aprobación en el Congreso en su tercera lectura. Esta busca implementar sellos de advertencia nutricional obligatorios al frente de los empaques de los productos alimenticios preenvasados, como parte de una estrategia de prevención y reducción de sobrepeso, obesidad y malnutrición de los guatemaltecos.

Aunque en el país se carece de indicadores recientes sobre los valores nutricionales de la población, uno de los compromisos de la agenda mundial del decenio de la nutrición de Naciones Unidas en el periodo 2016-2025 es mejorar los indicadores del estado nutricional en menores de cinco años y de mujeres en edad fértil. Guatemala es signataria de este compromiso, por lo que debe tomar acción con base en estas resoluciones. Uno de ellos promoviendo una ley de alimentación saludable de amplio beneficio para todos los guatemaltecos.

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